No era un sonido, eran muchos incontables sonidos los que salían del radiograbador amplificado con un par de parlantes más grandes: algunos se escuchaban, otros apenas se presentían y había más –seguro había más– que ni siquiera se adivinaban. En el garaje y atelier de César Miranda, algún atardecer nos sentamos a escuchar los sonidos de la selva.
A los 91 años murió, el miércoles, César Miranda, dibujante, grabador y pintor de reconocida trayectoria. Vino a Córdoba desde Corrientes de muy joven. Una de sus grandes pasiones eran los viajes al Amazonas.
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