Noticias Valentin Gruener no podía dejar a una leona cachorrita de un año a la deriva que fue abandonada en Botswana. Hoy, Sirga ya pesa 50 kilos y está siendo educada por Valentin para poder cazar y sobrevivir en la naturaleaza. Gruener ha pasado incontables horas tumbado boca abajo en modo salvaje y saltando en el agua para demostrarle cómo se hace. Él la salvó cuando tenía un año y estaba por morir de hambre. Es el líder del proyecto "Modisa Wildlife Project" en el que intentan salvar la especia enseñándole a los más chiquitos a valerse por sí mismos.
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