Buenos Aires. El vicepresidente, Amado Boudou, sumó ayer su segundo procesamiento por presunta corrupción, dictado en esta ocasión por el juez federal Claudio Bonadio, por la falsificación de los papeles de un auto que fue inscripto a su nombre.
La decisión llega un mes después de que Boudou fuera procesado por cohecho y negociaciones incompatibles con su función en la causa Ciccone, y cuando la oposición en el Senado presentó un pedido para suspenderlo en sus funciones hasta tanto se defina su situación en la Justicia.
Ahora, el juez Bonadio le dictó la medida por falsificación de documento público, a raíz de la adulteración de los papeles con que se inscribió un auto suyo. La resolución compromete aún más la situación política del funcionario, muy cuestionado por la oposición.
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